Ya conocemos lo tercos e ignorantes que pueden llegar a ser los aficionados al fútbol. A veces el supuesto amor por unos colores pasa por ser un amor platónico desmedido.
Existen aficionados tan retorcidos que siendo su equipo colista en segunda división, tercera o regional, intentan convencernos que su equipo es de élite. No hay nada que hacer con semejantes cabezas.
Una fábula que quiero contar pero con animales de dos patas es que el fútbol es deudor de los sistemas de entrenamiento del atletismo como de los materiales que se desarrollan y evolucionan en las actividades atléticas.
El fútbol no es el único deudor de los materiales que se desarrollan en el running sino también el montañismo y todos los deportes, desde el balonmano a la musculación en gimnasios.
La musculación por sí misma es un deporte atlético con sus propios métodos y ejercicios de base que sirven de complemento a los demás deportes.
No pasa de ser un complemento para el atletismo, y cuando no se tienen muchas ideas de alto entrenamiento deriva con frecuencia como entrenamiento específico sin serlo, y lo mismo ocurre en el fútbol y otros deportes, que termina provocando graves lesiones.
En los ejercicios de fútbol, los listos han puesto nombres propios a sus inventos inventos Frankenstein, pero no pasan de ser una variedad de simples circuitos Oregón.
Los ignorantes con diploma de preparador físico añaden sistemas de pesas, dañando las fibras y los músculos de los jugadores.
Cuando no se tienen muchos recursos ni conocimientos pasan estas cosas. Y lo de diseñar una tabla semanal de entrenamientos de fútbol con días aeróbicos y días anaeróbicos ni te cuento.
No saben ni situar el día y la hora que pueden hacer pesas al cincuenta por ciento cuando se está en competición para no romper a los jugadores.
En la ciudad donde vivo, me reencontré con un hombre que conocía de las carreras de ruta. Resultó ser vicepresidente de un club de balonmano femenino. No formé parte del cuerpo técnico pero hacía de asesor del entrenador estando el equipo en la segunda división territorial española.
Observando aprendí los movimientos del balonmano en los entrenamientos y detecté los ejercicios que provocaban que el equipo fuese chatarrero con pocas posibilidades de ascenso.
Todo lo que hice fue corregir e implantar entrenamientos de alto rendimiento anaeróbico dentro de la pista de balonmano.
Pronto las jugadoras empezaron a evolucionar y a ganar todos los partidos. El club subió como la espuma y a día de hoy se ha convertido en un referente, uno de los grandes de División de Honor del balonmano femenino.
Ganamos por primera vez en nuestra historia la Copa de la Reina, la Súper Copa de España y la segunda Copa de la Reina.
También ganamos la Cup Europea, la tercera liga EHF (Federación Europea de Balonmano, equivalente a la UEFA en fútbol).
En esto consistían mis entrenamientos corriendo por Chistau. Experimentación!.
Que conste que viviendo en Plan me ofrecí al Boltaña CF.
Les escribí una carta y no me contestaron nunca. No les pedí un millón de euros.
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